Cultivo interior
Puedes hacer de tu sótano, ático o de la habitación de los invitados un sitio profesional para cultivar marihuana. Para el cultivo interior tienes que ser capaz de controlar todo el ambiente. Necesitarás algunas nociones. La tienda Weed Seed te dará algunas nociones para convertirte en un jardinero de marihuana interior, una ligera descripción de la cultura completa del cannabis interior. Con algunos conocimientos y buenas manos será más fácil de lo que crees.
El clima de la planta estará determinado por 3 factores: aire, luz y tierra.
Aire fresco
En una habitación de cultivo que esté limpia, siempre hay la adecuada ventilación. A más plantas por habitación, más importante será la ventilación. Las plantas respiran a través de sus hojas. También se deshacen del veneno a través de sus hojas. Si la ventilación de la habitación no es la adecuada, los poros de las hojas se obstruirán y las hojas se morirán. Si hay algún movimiento de aire, el veneno se evaporará de las hojas y la planta volverá a respirar, convirtiéndose en una planta sana.
El aire usado está caliente por lo que es mejor que tengas una abertura en la parte superior de tu habitación o del armario. El aire nuevo que entra debe de hacerlo por la parte opuesta, creando una buena circulación.
La entrada del aire debe ser el doble que la de la salida, por lo que la habitación se llenará de aire fresco muy rápido. Evita las luces en las entradas y salidas del aire porque podrían ser obstruidas.
Luz
Cierra todos los agujeros y grietas! Es muy importante que tu habitación de cultivo esté protegida de la luz exterior. La duración de la noche es muy importante para el cannabis, por tanto, usa un temporizador para regular este ciclo.
Durante la primera fase de la planta, la fase de crecimiento, necesita una corta noche de 6 horas. Cuando incrementemos la duración de la noche a 12 horas, la segunda fase comenzará, es la fase de la floración. Llamamos a este mecanismo fotoperiodo.
Las lámparas de sodio de alta presión son perfectas para el cultivo interior. Dependiendo de la dimensión de la habitación puedes usar una lámpara de 400 o de 600 watios. La elección se debe hacer pensando que las plantas dentro de la habitación deben de quedar totalmente iluminadas. Si tienes lámparas de 400 W puedes usar una y media y gastarás la misma electricidad que una de 600 W. Para mantener óptimos resultados dentro de la habitación ésta debe de ser blanca o cubierta con un plástico reflectante.
Puedes también usar tubos de luces pero sólo si los pones muy cerca de las plantas. Si cultivas marihuana con muy poca luz, te dará problemas y plantas extresadas.